¿Qué es Design Thinking? Etapas y Cómo crearlo
Design Thinking es una metodología para crear soluciones innovadoras a las necesidades de nuestros usuarios. Se basa en investigación de usuario, propototipos y pruebas de usabilidad para encontrar nuevas formas de satisfacer las necesidades de los usuarios. Consta de 5 Etapas: Empatizar, Definir, Idear, Prototipo y Prueba.
Empresas como Apple debutaron con fuerza en el mundo de la Tecnología no solo porque el diseño de sus productos era visualmente atractivo, sino porque volvía más fácil el uso de las computadoras que anteriormente solo eran comprendidas por ingenieros de Software, permitiendo la comercialización masiva de estos aparatos y su expansión por el mundo.
El equipo de Apple tuvo en cuenta que su marca no se trataba solo de vender un producto, sino de ayudar a que sus usuarios pudieran usarlo de manera intuitiva.
Y con el paso de los años siguieron ofreciendo nuevos productos que resolvían nuevas necesidades que iban surgiendo conforme la sociedad se adentraba al mundo digital (iPhones, iPod, Tablets, SmartTV, Apple Watch, por citar algunos).
Apple, creada en los años 70s, se ha mantenido vigente 5 décadas después gracias a que sigue ofreciendo novedosos productos que solucionan nuevos problemas que van surgiendo en el mundo digital
¿Cómo ha hecho Apple para seguir reinventándose y sorprendiendo?
La clave detrás de esta metodología de trabajo tiene nombre y apellido: Design Thinking.
Así como Apple, empresas globales como Google y Airbnb han utilizado el Design Thinking como una fuerza impulsora que mejora el mundo en los negocios. Y en este artículo te ayudaremos a entender qué es, por qué es importante y cómo funciona este novedoso proceso de diseño.
¿Qué es Design Thinking?
Design Thinking es un método para crear soluciones innovadoras a las necesidades de nuestros usuarios. Está basada en investigación de usuario, propototipos y pruebas de usabilidad para encontrar nuevas formas de satisfacer las necesidades de los usuarios.
Consta de 5 Etapas: Empatizar, Definir, Idear, Prototipo y Prueba.
Gracias a ellas el equipo puede respaldar información de difícil acceso y aplicar una colección de métodos prácticos para ayudar a encontrar respuestas innovadoras.
De todos los procesos de diseño, el Design Thinking es probablemente el mejor para "pensar fuera de la caja".
Las 5 Etapas del Design Thinking
1. Empatizar: Investiga las necesidades de tus usuarios
En esta etapa debes tener una comprensión empática del problema que estás tratando de resolver, generalmente a través de la investigación del usuario empleando técnicas como la observación, encuestas y entrevistas a usuarios.
Por ejemplo, en el año 2000 fueron creadas las USB gracias a que un equipo consideró que era problemático que los usuarios de computadoras acumularan una gran cantidad de Disquetes de 3 pulgadas que se llenaban con un par de archivos y que se estropeaban fácilmente.
La empatía es crucial para un proceso de diseño centrado en el ser humano, ya que te permite dejar de lado tus propias suposiciones sobre el mundo y obtener una visión real de los usuarios y sus necesidades.
2. Definir: Indica las necesidades y problemas de los usuarios
Es hora de acumular la información recopilada durante la etapa de Empatía.
Analiza tus observaciones y sintetiza esos datos para definir en pocas palabras cuáles son esos problemas centrales que tú y tu equipo han identificado. Al definir los problemas podrás plantear uno o distintos objetivos.
En el anterior caso de los Disquetes la definición del problema sería: La baja capacidad de almacenamiento de estos dispositivos y la fragilidad de su material que le permite estropearse con facilidad.
3. Idear: Desafiar suposiciones y crear ideas
Ahora, estás listo para generar ideas.
La sólida base de conocimiento de las dos primeras etapas significa que puedes comenzar a "pensar fuera de la caja", buscar formas alternativas de ver el problema e identificar soluciones innovadoras a la declaración del problema que has creado.
La lluvia de ideas es particularmente útil aquí.
Por ejemplo, en el año 2012 al equipo de Snapchat se le ocurrió que en lugar de dar a sus usuarios la opción de eliminar contenido manualmente, ese contenido se podía eliminar automáticamente después de 24 horas.
Descubrieron que muchos usuarios buscaban privacidad y no querían tener contenido publicado en su perfil de forma indefinida. Y pensaron fuera de la caja para crear una solución que a nadie se le había ocurrido antes y que actualmente todas las redes sociales han replicado con su propia versión de Stories auto eliminables.
4. Prototipo: comienza a crear soluciones
Esta es una fase experimental. El objetivo es identificar la mejor solución posible para cada problema encontrado.
Tu equipo debe producir algunas versiones económicas y reducidas del producto (o características específicas que se encuentran dentro del producto) para investigar las ideas que han generado.
Esto podría implicar simplemente la creación de prototipos en papel. O bien podrias crear prototipo visuales o animados para representar la solución que creas más eficiente.
5. Prueba: pon a prueba tus soluciones
Los testers que evalúan los prototipos prueban rigurosamente estas herramientas empleando pruebas de usabilidad, donde usuarios representativos reales intentan completar tareas típicas mientras los evaluadores miran, escuchan y toman notas. El objetivo es identificar cualquier problema de usabilidad y corregirlo.
Aunque esta es la fase final, el Design Thinking es iterativo: los equipos a menudo usan los resultados para redefinir uno o más problemas adicionales.
Por lo tanto, puedes volver a las etapas anteriores para realizar más iteraciones, alteraciones y refinamientos, para encontrar o descartar soluciones alternativas.
En general, debes comprender que estas etapas son modos diferentes que contribuyen a todo el proyecto de diseño, en lugar de pasos secuenciales. Su objetivo es obtener la comprensión más profunda de los usuarios y cuál sería su solución o producto ideal.
Las USB fueron en su momento una pequeña solución para una gran necesidad de almacenar, respaldar y transferir archivos entre dispositivos que comenzaba a surgir con la llegada de las computadoras a nuestros hogares y escuelas.
¿Por qué es tan importante el Design Thinking?
Pareciera que es un concepto actual por sus implicaciones en el diseño de la Experiencia de Usuario (UX) en Sitios Web y aplicaciones móviles, pero el Design Thinking existe desde antes que existieran las computadoras y el Internet.
Ha sido de suma importancia para plantear las necesidades humanas que van surgiendo con el paso de los años como la necesidad de crear un modelo de tren más rápido y eficiente en los años 60s ante la migración masiva de población rural a las ciudades, o para idear un cinturón de seguridad y bolsa de aire en los coches en los años 70s como alternativa para disminuir el porcentaje de muertes por accidentes viales.
El ganador del Premio Nobel Herbert A. Simon mencionó por primera vez el Design Thinking en su libro de 1969, “The Sciences of the Artificial” y luego aportó muchas ideas a sus principios.
A partir de ahí, diversas organizaciones de una amplia gama de industrias han considerado que el Design Thinking es un medio valioso para resolver problemas para los usuarios de sus productos y servicios.
¿Qué necesito para crearlo?
Para comenzar a utilizar la metodología del Design Thinking en tu empresa es muy importante preparar estos cuatro puntos:
1. Los “Materiales”
Los “materiales” usados en las técnicas de Design Thinking están al alcance de cualquiera.
Puedes valerte de rotuladores, hojas de papel, notas adhesivas, lápices de colores, pegamento y una cámara de fotos. Serán tus herramientas para promover la comunicación visual, que es fundamental en el método.
Una imagen vale más que mil palabras. Y te ayuda a darle forma a tu idea.
2. El Equipo
En el Design Thinking es imprescindible trabajar en equipo.
Cuanto más diverso sea, mejor. Así puedes sumar puntos de vista, conocimientos y experiencia. Es imprescindible que haya al menos una persona con conocimientos sobre la metodología que sepa guiar el proceso.
Y aunque debe tener un núcleo estable de personas que participen hasta el final, se podrán sumar otras dependiendo de la fase en la que nos encontremos. Por ejemplo, en la generación de ideas o en la prueba de prototipos.
3. El Espacio
Busca un sitio lo suficientemente amplio para trabajar en torno a una mesa, con paredes libres donde pegar la información que vayan generando.
Piensa en un lugar luminoso e inspirador donde todos se sientan cómodos y con un buen estado de ánimo. ¿Has escuchado hablar de las famosas oficinas de Google?
Un espacio cómodo e inspirador invita a las musas de la inspiración a visitarte y, por consecuencia, incrementa la productividad.
4. La Actitud
En el método de Design Thinking es imprescindible la actitud. Debemos adoptar la que se denomina “Actitud del Diseñador”. Ser curiosos, y observadores.
En cualquier detalle podemos encontrar información trascendental. Debemos ser empáticos, tanto con las personas como con sus circunstancias. Ser capaces de ponernos en la piel del otro. Cuestionarnos el Status Quo, y no cargar con prejuicios. Ser optimistas y positivos. Perder el miedo a equivocarnos y ver los errores como oportunidades.
Las divertidas oficinas de Google son posiblemente el mejor ejemplo de cómo un espacio de trabajo puede convertirse en un campo fértil para las nuevas ideas.
¿Quiénes se benefician del Design Thinking?
Según Tim Brown, actual CEO de IDEO, el Design Thinking “es una disciplina que usa la sensibilidad y métodos de los diseñadores para hacer coincidir las necesidades de las personas con lo que es tecnológicamente factible y con lo que una estrategia viable de negocios puede convertir en valor para el cliente, así como en una gran oportunidad para el mercado”.
¿Quiénes lo utilizan?
Si bien el Design Thinking es popular entre los diseñadores, es ampliamente utilizado por personas de todas las disciplinas. Incluso entre las agencias de diseño, el trabajo es famoso por ser multifuncional: IDEO y agencias similares contratan a no diseñadores (chefs, ingenieros, científicos sociales, biólogos) y los integran en sus equipos de proyecto para agregar perspectiva.
Empresas como Apple, Google, IBM, Nike o Zara lo utilizan. Al ser un gran generador de innovación, se puede aplicar a cualquier campo. Desde el desarrollo de productos o servicios, hasta la mejora de procesos o la definición de modelos de negocio. Su aplicación no tiene límites y puedes echar a volar tu imaginación tanto como lo desees.
Personas de todas las profesiones y de cualquier industria pueden participar activamente como parte de los Equipos de Design Thinking que desarrollen productos y servicios novedosos para cada problema que se presente en la vida cotidiana.
UN FUTURO SIN LÍMITES
Steve Jobs solía decir que la gente no siempre sabe lo que quiere.
Si él hubiese preguntado a la gente qué necesitaban para mejorar su experiencia con las computadoras en los años 2000´s probablemente le habrían pedido computadoras “más rápidas” en lugar de imaginar Smartphones, Tablets y otros productos que no existían en ese momento y que revolucionaron la industria.
Si Carl Benz hubiera preguntado a la gente qué querían para desplazarse más rápido en el Siglo XX probablemente le habrían pedido caballos más rápidos, en lugar de imaginar un motor de gasolina que propició el desarrollo de nuevos modelos de transporte que la gente jamás habría imaginado como una posibilidad.
Es responsabilidad del Equipo de Design Thinking pensar fuera de la caja para ofrecer soluciones a problemas que los usuarios tienen sin necesidad de darles “lo que piden o lo que esperan” pero entendiendo perfectamente las dificultades y frustraciones que ellos viven y ayudándolos con el desarrollo de productos que les facilitan la vida.
Recientemente, gracias al Design Thinking podemos disfrutar de innovaciones como los Asistentes de Voz (Siri o Alexa), las plataformas de Streaming y de Cursos en Línea, el servicio de taxi a domicilio (Uber), las Freidoras de Aire y nuevos inventos que surgen cada año para facilitarnos la vida. Y sin duda alguna, mientras lees este artículo, ya hay equipos en distintas partes del mundo, en todas las industrias, desarrollando las innovaciones que reinventarán el presente para crear un futuro donde la imaginación no tiene límites.